Patrones oscuros o Dark Patterns

Los patrones oscuros, también conocidos como "dark patterns", en inglés, son técnicas de diseño utilizadas en la creación de interfaces de usuario que tienen como objetivo engañar o confundir a los usuarios para que tomen ciertas decisiones o acciones.

Su diseño está destinado a influenciar en el comportamiento y las decisiones de las personas durante el tiempo que interactúan con páginas webs, apps o redes sociales. Se tratan de  prácticas poco respetuosas que persiguen manipular la interacción de las personas consumidoras.

El uso de este tipo de patrones, ampliamente utilizados ha sido objeto de análisis por parte de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ya que pueden manipular las decisiones del usuario respecto al tratamiento de sus datos personales. 

 

Por este motivo, en su Guía de Protección de Datos por Defecto, la AEPD analiza los dark patterns concretamente en los apartados VI y VIII y advierte que los responsables del tratamiento de datos deben garantizar que no se emplean patrones oscuros, especialmente con relación a las decisiones que afectan al tratamiento de los datos personales. 

El Comité Europeo de Protección de Datos (EDPB) ha publicado también sus Directrices sobre patrones oscuros o dark patterns en interfaces de redes sociales: Cómo reconocerlos y evitarlos. Estas directrices, al igual que la guía de la AEPD, toman como punto de partida el artículo 5.1.a del Reglamento General de Protección de Datos para evaluar cuándo un patrón de diseño corresponde con un patrón oscuro. 

Algunos ejemplos de patrones oscuros incluyen:

Texto pequeño o difícil de leer: El texto puede ser muy pequeño o tener un color que se mezcla con el fondo, lo que dificulta la lectura y la comprensión.

Botones de acción ocultos: Los botones de acción pueden estar ocultos detrás de otros elementos de la página o en una posición difícil de alcanzar, lo que puede confundir a los usuarios y hacer que hagan clic en algo que no quieren.

Confirmaciones implícitas: Las confirmaciones implícitas son aquellas en las que el usuario no tiene que confirmar explícitamente una acción, sino que se asume que ha confirmado la acción simplemente porque ha hecho clic en un botón.

Diseño de páginas engañosas: El diseño de una página puede ser engañoso, haciendo que los usuarios crean que están en una página diferente o que están realizando una acción diferente a la que están realizando en realidad.

Sobrecarga (overloading): Se presentan demasiadas posibilidades a la persona que tiene que tomar las decisiones, lo que termina generando fatiga y acaba compartiendo más información personal de la deseada.

Ocultación (skipping): La interfaz o experiencia de usuario se presenta de tal manera que el usuario no piense en algunos aspectos relacionados con la protección de sus datos, o que lo olvide.

Emocionar (stirring): se apela a las emociones de los usuarios o se utilizan empujones visuales en forma de efectos para influenciar en las decisiones.

Obstaculización (hindering): trata de poner trabas para que el usuario no pueda realizar de forma sencilla y accesible ciertas acciones o proporcionando información engañosa sobre los efectos de algunas acciones.

Inconsistencia (fickle): Se presenta un diseño inestable e inconsistente que no permite realizar las acciones deseadas por el usuario.

Enturbiar (left in the dark): la información o las opciones de configuración de la privacidad se esconden o se presentan de forma poco clara utilizando un lenguaje errático, información contradictoria o ambigua.

 

En general, los patrones oscuros son técnicas de diseño que buscan influir en el comportamiento de los usuarios de manera oscura y no ética. Es importante que los diseñadores de sitios web y aplicaciones sean conscientes de estos patrones y eviten utilizarlos para no engañar o confundir a los usuarios.